SIDA, VIVIR TODOS QUEREMOS, MORIR NINGUNO.
Por: Nino Arias Almonte
El Placer y el Sida uno conjuga al otro, vivimos auto engañándonos con realidades que por mas que se quiera no se puede ocultar, el sida es una realidad que vive con nosotros y es fiel a todos sin importar de donde somos, quienes somos, raza, religión o cualquier rango social que se tenga.
Cuando se piensa en placer o cuando se esta en placer pues se olvida de una vez y por toda el Sida, el placer olvida la muerte, olvida los amargos caminos de una enfermedad que sega la vida sin esperanza por no tener hasta el momento una cura.
El sida tiene una cara engañosa, tiene cara de belleza, tiene cara de reina, de príncipes azules, tiene cara de dinero, tiene cara de viaje, tiene en fin todas las caras hecha a las medidas para confundir y permitir caer en las garras destrozadoras de la muerte a destiempo.
El sida no tiene edad, es como un pez que nada libremente por sus aguas con la boca abierta atrapando a todos aquellos que tienen una debilidad extrema ante el placer o el desnudo en busca de satisfacer un deseo que hasta se podría decir que puede ser momentáneo.
¿Pensamos en el Sida? … si, pensamos en el cuando vemos a alguien sufrir los ataques feroces de la enfermedad o cuando vemos a alguien morir por esta enfermedad pero el pensamiento es efímero, es decir no es duradero porque cuando una mujer nos atrae pues poco importa que tenga o no Sida y de la misma manera le pasa a la mujer cuando se trata de un hombre aparente o que tenga un atractivo de una u otra manera.
¿Quieres vivir o morir? … eso esta en ti, si quieres vivir tienes que cuidarte rechazando y evadiendo las tantas caras engañosas que tiene el Sida las cuales están por todos los lados.
Si quieres morir es fácil, solo tienes que no hacer caso a lo que digo en este artículo y pronto tendrás un lugar en cualquier cementerio y la sociedad solo te recordara para ponerte de ejemplo diciendo “fulano murió del Sida”.
Hay personas que cuando descubren que están infectados por el virus del sida pues comienzan a contaminar a todos los que son presas fáciles sin hacerle saber que están en esa condiciones y al final hay una cadena que envía a la tumba fría a una gran cantidad de personas y muchos antes de saber que están infectados pues también tienen varias personas contaminadas.
Pero solo nos queda decir ante esta fiera enfermedad que no tiene compasión, que tontos, pero que tontos somos que aun sabiendo que mata fácilmente nos entramos en sus terrenos de una manera desarmada y solo queremos reflexionar cuando ya los minutos se están contando.
Pero en fin, aun todavía tú al igual que yo tenemos oportunidades para evadir esa cruel fiera que camina libremente entre nosotros los seres humanos.
Hagamos un alto y digámosle NO AL SIDA.
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